Cómo tener una empresa competitiva en la actualidad se ha convertido en uno de los grandes interrogantes.
¿Qué hacer? ¿Dónde estar y dónde no? ¿Cuánto dinero invertir y en qué? Son algunas de estas cuestiones que muchas organizaciones se hacen ante la situación generada por la crisis.
Las organizaciones, principalmente el tejido empresarial compuesto por PYMEs, ha visto cómo la crisis provocada por el coronavirus ha ocasionado la destrucción de casi 77 mil empresas. Estos datos, de principios de septiembre, no esconden otro dato aún más grave: esta mortalidad empresarial durante estos últimos seis meses es similar a la producida durante los años 2008 a 2012 de la crisis.
Sin embargo, son muchas las empresas que están aprovechando las oportunidades que existen en el mercado y los cambios en la cultura de consumo para afianzar su posicionamiento y contar con una posición ventajosa sobre el resto. Así, por ejemplo, los sectores relativos a la tecnología como puedan ser las apps de deporte, el big data o las videollamadas, tienen un panorama bastante más cómodo que el de otros sectores.
LA GRAN PREGUNTA: CÓMO TENER UNA EMPRESA COMPETITIVA
Por eso, muchos empresarios se preguntan cómo tener una empresa competitiva ante un horizonte en el que lo único cierto, es su incertidumbre. Y no son pocas las respuestas a dicha pregunta. Por eso, en Ifedes hemos recopilado 10 consejos para reforzar el posicionamiento de tu empresa y poder tener un desarrollo de negocio sostenible.
1.- Apuesta por la Innovación
A veces uno piensa en la innovación como una película de ciencia ficción y nada más lejos de la realidad. Si nos atenemos a la definición de Innovación (Acción de innovar, de cambiar las cosas introduciendo novedades) caeremos en la cuenta de que, en muchas ocasiones, las empresas tienen miedo a introducir novedades y caen en el error de vivir en continua inercia, valga la redundancia.
Herramientas, productos/servicios, procesos, estrategia… Una empresa competitiva tiene parte de su ADN en modo Beta: testeando, corrigiendo e implementando.
Un buen ejemplo de innovación es Manufacturas Lillotex, una empresa dedicada al sector textil (pantalonera) que para evitar el cierre de la empresa y el despido general de sus trabajadores, optó por cambiar gran parte de su producción y centrarse en el ámbito sanitario, produciendo mascarillas, batas, guantes, etc., lo que les ha permitido no solo subsistir, sino hacerse un nombre en el sector.
[bctt tweet=»En muchas ocasiones, las empresas tienen miedo a introducir novedades y caen en el error de vivir en continua inercia» username=»@grupoifedes»]
2.- Procura ser más ágil
¿Recuerdas hace un año cuando hablaban de teletrabajo? ¿De cuando en las reuniones se mencionaba eso de Zoom y alguien respondía “16-85 mm”?
La vida es de los rápidos, nos decían de pequeños. Y para el mundo empresarial es verdad. Este año ha supuesto un vuelo para todos y para todo y solo aquellas empresas que han sabido adaptarse a la menor velocidad posible han sido las que han podido sobrevivir. De ahí que la agilidad sea fundamental y que las empresas tengan que huir de estructuras pesadas y lentas como viejos elefantes.
3.- Mejora tu comunicación
En un momento en el que la dirección de las noticias en medios es casi homogénea: destrucción de empresas y empleo, caída del turismo aumento de brotes, aportar un poco de luz entre tanta oscuridad siempre será bien recibido por tus clientes. De ahí que muchas empresas hayan optado por diversificar los contenidos de sus comunicaciones hacia elementos alejados del covid, la pandemia y demás temáticas negativas.
Un ejemplo de ello es… Ifedes, donde en pleno confinamiento renovamos por completo nuestra newsletter para hacerla más interesante, útil y atractiva. (¿Quieres verla?).
Además, tu cliente y tus proveedores agradecerán que tengas un canal de comunicación directo y abierto con ellos, evitando así la sensación de desamparo en un momento dado.
4.- Cuida la Experiencia de tu Cliente
Tal y como se mencionó en la mesa redonda celebrada el pasado mes de Junio, (Retos de las empresas ante el nuevo horizonte), las empresas competitivas tienen un rasgo en común: la motivación por mejorar la experiencia de sus clientes con su marca.
Es fundamental en este aspecto, detectar al nuevo tipo de consumidor y adaptarse a este nuevo tipo de cliente que demanda una mayor seguridad.
Para lograrlo, ocúpate de conocerle, de trazar su “viaje” con tu marca, los puntos fuertes y débiles, de saber su ticket medio, su cultura de consumo, sus preferencias… En definitiva, procura conocerlo todo de él. Solo así podrás mejorar tu relación con él y conseguir convertirlo en embajador de tu marca, reduciendo costes en comunicación y aumentando la eficacia de tus procesos.
5.- No hay excusas: Se digital
Las empresas que no han sabido apostar por la digitalización, que no han sabido adecuar sus modelos de negocio al entorno digital, son aquellas que mayor daño han sufrido en esta crisis. Por eso, no hay excusas si lo que se quiere es tener una empresa competitiva.
No se trata solo de estar en las redes sociales, de hacer tiktok grupales cantando Resistiré, sino de ser realmente digital: procesos automatizados que permitan agilidad, implementación de herramientas que favorezcan la consecución de objetivos, e incluso procesos comerciales híbridos que permitan a tu equipo generar ventas reduciendo costes y tiempos.
[bctt tweet=»Ladigitalización va más allá de estar en las redes sociales o de hacer tiktok grupales cantando Resistiré, sino de ser realmente digital, con procesos y herramientas 100% digitales» username=»@grupoifedes»]
6.- Foco Estratégico
Una de las respuestas más clara a cómo tener una empresa competitiva reside en el foco estratégico. Una empresa cuyos movimientos estén respaldados por una estrategia tiene muchas más posibilidades de éxito que otra cuya estrategia sea nula o constantemente cambiante.
Y en relación a esto, hay que señalar que las estrategias deben ser cambiadas cada cierto tiempo. Es lógico y natural porque cambian en función de los mercados. Si no, corremos el riesgo de vivir una inercia estratégica que no aporte ninguna mejora s ls compañía.
7.- Practica el análisis continuo
Una de las claves del ser humano siempre ha sido su capacidad para cuestionarse todo en todo momento. Y las empresas tienen que aprender de ese movimiento entendiéndolo como capacidad de análisis constante.
Ser capaces de analizar constantemente los procesos en busca de la mejora es sinónimo de competitividad; de valor añadido. Pero, también, de medición constante. Es fundamental, en este sentido, marcarse hitos o KPIs que sirvan de medición: ventas, operaciones ganadas, operaciones perdidas, clientes ganados, clientes perdidos, ratio de recurrencia de compra…
8.- Busca alianzas
Hay una frase muy manida ya que dice que solo se corre más rápido pero en equipo se llega más lejos. En estos tiempos, donde impera la ley del más fuerte, empresarialmente hablando, es fundamental buscar alianzas que nos permitan hacernos más fuertes.
Así, por ejemplo, el acuerdo de colaboración entre dos restaurantes, una inmobiliaria y unos apartamentos en Benidorm, ha dado como fruto un proyecto por el que se trata de incentivar el turismo nacional a través de cheques de pensión completa por apenas 200 € a la semana.
9.- Capta y Desarrolla el talento
Una de las claves del éxito de una empresa radica en las personas, en el músculo humano que hay detrás de la organización. Por eso, en estos tiempos difíciles, mantener el talento debe ser una prioridad. Pero no la única. También captar y desarrollar a tu equipo gracias a la formación debe ser un impulso para conseguir esa competitividad que buscan los empresarios.
10.- Cuida la gestión Económico-Financiera de tu empresa
Conocer el entramado de herramientas financieras a tu alcance es parte del ADN de una empresa competitiva. No solo se trata de implantar metodologías de seguimiento y control para tomar decisiones de manera ágil y eficaz. También, has de saber aprovechar las ventajas que ofrece la administración pública, así como otras posibilidades que hay a tu alcance para alcanzar tus objetivos: fusiones, adquisiciones, reestructuración de la deuda, financiación…
En definitiva, son 10 claves, 10 consejos que tratan de dar respuesta a cómo tener una empresa competitiva. Sin embargo, hay muchas otras maneras de lograrlo. Si quieres, hablamos y te contamos cómo podría hacer de tu empresa una organización más competitiva, ¿te parece?